Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Cuento
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Cuento
Categoría: Urbanos

luchito

Luis Sanhueza era un hombre bonachon,amante de su esposa y sus hijos,nunca nadie tuvo un motivo de sospecha hacia su persona,respetuoso en el trabajo,sus compañeros lo respetaban,y poco a poco
se fue ganando la comfianza de sus patrones ,llegando al puesto de Gerente de operaciones de la fabrica,donde trabajaba,pero esa tarde de invierno,todo cambio ,y justo fue a pasar ahora cuando estaba la familia reunida,cuando estaban los amigos y vecinos.
Al sentarse y mirar se dio cuenta,aunque extrañado por lo que veia,del fondo de la sala de descanso de su casa,vio caminar hacie el,a una mujer llorando, toda de negro,de pronto su corazon se acelero cuando reconocio a la mujer.
--¡¡Maria!! grito pero se dio cuenta que nadie lo escucho,ni Maria que venia con dos jovencitos que la sostenian de cada braso.
Y tambien ,se dio cuenta que todos sus amigos y vecinos,tenian caras de mucha pena ,Jorge su hijo mayor,estaba al lado de su madre,y su hija toda de negro lloraba desconsoladamente.
--¡¡Rosita! penso,mas cuando se hiso silencio
en toda la casa,al entrar la mujer de negro,con los jovenes,volvio su mirada a ellos,la mujer pego un grito y se abraso a el,quiso rechasarla ,
--¡¡cuidado!! esta Rosa dijo y se corrio con un salto hacia el costado,recien ahy se dio cuenta lo que estaba sucediendo,la mujer abrasada a un ataud junto con los jovenes,--miro donde Rosa la cual al ver el gesto de la mujer y los niños ,comprendio en el acto lo que sucedia,y con un grito desgarrador,se levanta de golpe del asiento y se desmaya.
La mujer del ataud, cuando lo abrazo, pego un grito que se escucho en toda la manzana del barrio
-¡¡Luis!!.
Para que decir la que se formo,todos se miraban,
las viejas del barrio al fin le encontraron una basurita en el ojo al Luchito ,la mayoria de los hombres presentes ya sea de la familia o los vecinos,se les coloco en el rostro una sonrisa,
como diciendo.
-¡Mira Luchito! ¡ quien lo diria!
Pero el al darse cuenta de la situacion ,pego un grito y casi se desmaya,se aserco con temor al ataud y miro al que yacia dentro ,al darse cuenta que era el,pego un grito desgarrador,pero nadie lo escuchaba,miro a Rosa que era atendida por Jorge,trato de caminar hacia ella,pero sus piernas temblaban como alambres de resortes,trato de abrazarla ,pero nada sucedio,el escandalo fue de proporsiones,la Maria abrasada al cajon,sin importarle nada mas en el mundo,lloraba y gemia
desconsoladamente,algunos amigos de Luis trataban de alejarla del cajon,tratando de llevarsela para la calle,pero ella mas se aferraba a el.
-¡Luis!¿porque te fuistes?
Al fin lograron despegarla del cajon,sacandola de la casa,un familiar del finado se los llevo,
mientras tanto la viuda saliendo de su desmayo,se quedo sentada sin decir palabras,mientras su hija la atendia,a su hijo no lo vio,el trato de hablarle pero ella no se daba cuenta que el estaba hablandole ,se dirigio hacia un grupo de vecinas que comentaban en voz baja,ya ninguna de ellas resaba el ave Maria,en vez de eso.
--Mire con don Luis,tan calladito el.decia una de ellas.
--Aqui no quebraba un huevo y por otro lado los
quebraba por docenas decia la otra.
Se sintio cansado de escucharlas,y se dirigio
hacia sus amigos,los cuales al llegar escucho.
--¿Quien lo diria, mi compadre Luis?
--Se hacia el huevon no mas,comento uno de ellos
--¡y QUE CALLADITO SE LO TENIA!casi grito el otro
-Saco pecho por mi compadre,dijo uno de ellos
era alto macho ,nunca nadie lo supo,a mi comadre nunca le falto nada,crio bien al Jorge y a la Rosita le dio todo sus estudios.
--se fijaron en el medio pellejo que tenia la otra viuda --dijo otro-- estaba mejor que la comadre Rosa,y los dos cabros que andaban con
ella se parecian a mi compadre.
De pronto Luis sintio un cansancio tan grande
quiso sentarse en su sillon favorito,pero noto que ya no le gustaba,probo sentarse en una silla ,pero tampoco se sintio comodo.
--Voy a acostarme en mi cama mejor.
Al llegar al dormitorio,quiso acostarse, pero
no pudo ,el cansancio era tremendo ,llego al salon donde estaban todos,sintio un impurso tremendo de acostarse en el cajon,pero no queria hacerlo ,trato de vencer ese cansancio,y quedarse un rato mas despierto,pero al fin el sueño pudo mas que el ,y se subio al ataud acostandose ,escucho un rato mas las palabras de los que hay estaban,y se durmio para siempre.

FIN
Datos del Cuento
  • Categoría: Urbanos
  • Media: 4.48
  • Votos: 33
  • Envios: 0
  • Lecturas: 4368
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.145.178.240

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Cuentos: 21.633
»Autores Activos: 155
»Total Comentarios: 11.741
»Total Votos: 908.508
»Total Envios 41.629
»Total Lecturas 53.552.815