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La Ubicación de nuestra Tierra

La Ubicación de nuestra Tierra.
(¿Evolución o Creación?.-2-)
Nuestro hermoso Planeta Tierra es una verdadera joya espacial, es un lugar que está vivo, lleno de vida vegetal, animal y humana. La vida en la Tierra jamás habría llegado a existir de no ser por una serie de felices "coincidencias", algunas de las cuales eran desconocidas o mal entendidas hasta el siglo XX. Son de destacar las siguientes:
1.- La ubicación de la Tierra en la galaxia Vía Láctea y en el sistema solar, así como su órbita, inclinación, velocidad de rotación y su singular Luna.
2.- Un campo magnético y una atmósfera que forman un doble escudo protector.
3.- Ciclos naturales que reabastecen y purifican las reservas de aire y agua.
Al examinar cada uno de estos puntos, pregúntese amigo lector: "¿Son las características de la Tierra el producto del ciego azar, por pura casualidad, o el de un diseño de un creador con un propósito adecuado?". Comencemos considerando el "domicilio" perfecto donde habitamos.
Por ejemplo, cuando escribimos nuestro domicilio, ¿que datos ponemos?. Entre otros, el país, la ciudad y la calle. A modo de comparación, la galaxia Vía Láctea sería el "país" de la Tierra. El sistema solar -formado por el Sol y sus planetas-, sería la "ciudad" y la órbita que la Tierra describe dentro del sistema solar sería la "calle". Gracias a los adelantos de la astronomía y la física, los científicos han aprendido muchísimo sobre las ventajas de nuestra ubicación especial en el universo.    
Para empezar, nuestra "ciudad" -el sistema solar- se halla situada en la región ideal de la Vía Láctea, ni muy cerca ni muy lejos del centro. Esta "zona de habitabilidad", como la denominan los astrónomos, posee la concentración adecuada de los elementos químicos necesarios para la vida. Mas allá, dichos elementos escasean, mas acá, el vecindario es sumamente peligroso debido a la abundancia de radiación letal y otros factores. Como dice la revistsa 'Scientific American', "Vivimos en un sector exclusivo".
La "calle" ideal, no es menos exclusiva, es decir, la órbita o trayectoria que sigue la Tierra dentro de nuestra "ciudad", el sistema solar. Dista del Sol a unos 150 millones de kilómetros  (lo que es igual a unos 93 millones de millas) y se encuentra dentro de los límites de una zona idónea para el desarrollo de la vida, porque allí los organismos ni se congelan ni se chamuscan.  Además, por ser casi circular, nos mantiene más o menos a la misma distancia del astro rey durante todo el año.
También tenemos un "vecino" perfecto. Si tuviéramos que escoger un "vecino" para la Tierra, no hallaríamos uno mejor que la Luna. Su diámetro mide algo más que la cuarta parte del de la Tierra. Por lo tanto, comparada con otras lunas de nuestro sistema solar, la nuestra es excepcionalmente grande respecto a su planeta anfitrión. ¿Sería todo esta ubicación por mera coincidencia o casualidad?. Categóricamente, no parece que sea así. En primer lugar, la Luna es la principal causa de las mareas oceánicas, tan vitales para la ecología del planeta. Además, su presencia estabiliza la orientación del eje terrestre. Sin su satélite hecho a la medida, nuestro planeta se bambolearía como un trompo y quizás hasta se volcara y girara acostado. Los cambios que se producirían en el clima y las mareas, entre otros, serían catastróficos.
Hablemos ahora de la inclinación y rotación perfecta de la Tierra. La Tierra tiene una inclinación de aproximadamente 23,4 grados, lo que da lugar al ciclo anual de las estaciones, modera las temperaturas y permite una amplia variedad de zonas climáticas. "La inclinación del eje terrestre parece ser la 'idónea'", señala el libro 'Rare Earth -Why Complex Life Is Uncommon in the Universe'. (Tierra rara -Por qué la vida compleja es tan escasa en el Universo). "Idónea" es también la duración del día y la noche, que resulta de la velocidad de rotacion de la Tierra en torno a su eje. Si fuera mucho más lenta, los días serían más largos y la cara del planeta que da al Sol se abrasaría, mientras que la otra cara del p;laneta se congelaría. Al revés, si la Tierra girara mucho más de prisa, los días durarían menos, quizás unas cuantas horas y se generarían vientos huracanados incesantes y otros fenómenos perjudiciales.
Después de considerar estos puntos anteriores: ¿Podría la Tierra estar en un lugar más idóneo para la vida?, ¿que crees?: ¿Será la ubicación de nuestro planeta Tierra, por pura casualidad, por una simple coincidencia o por una obra de un diseñador inteligente que puso todas las condiciones necesarias para la vida y su mantenimiento en el lugar apropiado?.  Muy ciertas son las palabras del escritor bíblico Nehemias que mencionó: "Tú eres Jehová, tú solo, tú mismo has hecho los cielos aún el cielo de los cielos y todo su ejército, la tierra y todo lo que hay sobre ella, los mares y todo lo que hay en ellos y tú los estás conservando vivos a todos ellos y el ejército de los cielos se está inclinando ante tí".-Libro de Nehemías, capitulo 9, versículo 6.
Sólo hemos considerado el primer punto que mencionamos al principio. El punto 2 sobre el campo magnético, la atmósfera y el punto 3 sobre los ciclos naturales, hablaremos de ellos en la proxima ocasión que lleguemos a escribir algo más sobre nuestro planeta vivo: La Tierra.

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