Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Cuento
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Cuento

Don Ratón y Don Gato

Don Ratón y Don Gato eran una pareja de amigos muy singular. Aunque normalmente los ratones y los gatos no se llevan bien, estos dos animalitos tenían una curiosa amistad. 

A Don Ratón le gustaba la protección y seguridad que le daba Don Gato y a Don Gato le gustaba sentirse un héroe protegiendo a Don Ratón de los demás felinos.

Pero a Don Gato eso de ser un héroe se le subió a la cabeza, tanto que empezó a sentirse superior a Don Ratón. Al fin y al cabo, él era el más fuerte y el más poderoso de los dos. Y así se lo hacía notar una y otra vez a su amigo Don Ratón. 

-No olvides, Don Ratón, que comemos gracias a mi astucia y a mi fuerza -repetía un día tras otro a la hora de comer.

-No olvides, Don Ratón, que ningún gato te ataca porque sabe que eres mi amigo -decía siempre que salían a pasear.

-Recuerda siempre lo mucho que te he enseñado sobre la vida, Don Ratón, que sin mí estarías encerrado en cualquier agujero mugriento -decía cuando su pequeño amigo se mostraba incómodo por algo.

Un día, Don Ratón se cansó de tanta soberbia y altanería y se marchó sin más aprovechando la siesta de Don Gato. Cuando Don Gato despertó llamó a su amigo, como hacía siempre:

-Don Ratón, ya estoy despierto. Ya puedes peinarme el pelo y quitarme los piojos.

Pero Don Ratón ya estaba muy lejos, así que no hubo respuesta. Don Gato, que no había descubierto la marcha de su compañero, siguió llamándole.

-¿Dónde te has metido, Don Ratón? Tienes que ayudarme a limpiar mi cama, y a despistar a las señoras mientras cojo algo de sus cocinas para la cena. 

-No insistas, Don Gato. Don Ratón se ha ido -le dijo Doña Paloma-. Se debió hartar de sentirse un miserable y se fue. Aunque parece que tú te las vas a apañar bastante mal sin él.

Don Gato se dio cuenta de lo injusto y soberbio que había sido con su amigo.

-¿Sabes hacia dónde fue? -preguntó Don Gato a Doña Paloma-. Tengo que pedirle perdón a mi amigo.

Doña Paloma le indicó a Don Gato la dirección por la que se había ido Don Ratón, que no paró de correr hasta que lo encontró.

-Amigo, no te vayas -le dijo Don Gato a Don Ratón-. Siento haber sido tan estúpido. Somos compañeros, nos necesitamos el uno al otro.

-¿Eso significa que no puedes vivir sin mí? -preguntó Don Ratón.

-Eso significa que mi vida es mucho mejor cuando la comparto contigo -respondió Don Gato-. Vale, la verdad es que no sé qué haría sin ti.

-Está bien, te perdono -dijo Don Ratón-. La verdad, ya me estaba preguntando cómo me las iba a apañar yo solo esta noche. 

Don Gato y Don Ratón no volvieron a tener ningún gran problema, salvo pequeñas discusiones que se solucionaban aplicando la única regla que debe existir para que cualquier relación entre dos individuos funcione: el respeto mutuo.

Datos del Cuento
  • Categoría: Infantiles
  • Media: 0
  • Votos: 0
  • Envios: 0
  • Lecturas: 121
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.143.168.172

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Cuentos: 21.633
»Autores Activos: 155
»Total Comentarios: 11.741
»Total Votos: 908.508
»Total Envios 41.629
»Total Lecturas 53.552.815