Casi es de noche y Don Panchito esta contento porque acaba de pasar la vecina de la vuelta y le estuvo contando unos chistes de esos que son para pura gente grande y sé a tirado unas carcajadas de esas que se oyen en toda la cuadra y aparte de los chistes le a contado las ultimas novedades del pueblo y alrededores, cuando por fin se fue dejando a Don Panchito con el estomago doliéndole de la risa se quedo sonriendo jalando aire para reponerse de las carcajadas que soltó con las ocurrencias de la vecina de la vuelta.
Pensando para sí se pegunto como le hace esta mujer para estar siempre al día en los chistes que van con las noticias del momento y en los chismes del pueblo siempre esta al tanto de todo lo que pasa no se le va ni una viva y más si se trata de maltratadas y maridos engañados ella se las sabe de todas, todas.
Se puso a hacer memoria y continuando con la sonrisa en los labios recordó como esta vecinas era la que siempre le contaba su difunta esposa que en paz descanse todos los chismes del pueblo y los que no sé sabia los inventaba porque para que negarlo tiene muy buena imaginación y la mente un poco cochambrosa para que negarlo, como le hará para tener tiempo de estar en el arguende siempre a demás no es de las que descuida la casa por estar en la calle, su casa esta limpia y arregladita es una de las mas bonitas del pueblo, pero hay algo que ella no sabe o se hace la desentendida se sirvió otra taza de café prendió otro cigarro y exhalo lentamente el humo............... su marido le esta poniendo los cuernos con la esposa del molinero.
Su vista se queda fija en el fin de la calle pero en sus labios no se perdió la sonrisa.