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¿Tres?

(Para Pame, Chellín y Lian)

En un principio fue un leve zumbido que poco a poco fue aumentando de volumen. Las dunas de arena no me permitían divisar más allá de unos dos kilómetros pero lo sentía. En esos solitarios parajes era extraño escuchar algo parecido.
Me había refugiado por algún tiempo tratando de alejarme del bullicio de la ciudad a fin de que “Doña Inspiración” me iluminara para la próxima exposición que de acuerdo a mis planes sería en base a los paisajes desérticos, aunque esto de desierto solo lo justificaba la presencia de enormes y caminantes dunas de arena que en color amarillo cambiante que alteraban a su vez el paisaje.
Recuerdo que al llegar hube de recorrer en un Jeep, por cierto descubierto cosa que en mi vida vuelvo a permitir, algo así como unos doscientos kilómetros.
La imagen más común que se tiene del desierto es la de abandono, de fuertes vientos y sol cegador, de dunas, de arenas interminables, remotos peñascos y tierra cuarteada. Sin embargo, aunque es un ecosistema de clima y condiciones extremos no está del todo abandonado, ya que muchas plantas, animales y hasta el mismo hombre se han adaptado a vivir en él.
El desierto al igual que todos los grandes desiertos, se caracteriza por los grandes saguaros,

que son los cactus siempre presentes en las películas de vaqueros. Estas interesantes cactáceas varían su tamaño desde el de un caballito de tequila hasta unos quince metros, no tienen hojas pero hay que ver sus espinas que les sirven para repeler a los animales sedientos con excepción los pequeños buhos

que hacen minúsculos refugios, son de tallo carnoso con pliegues, sus raíces están diseñadas para captar la mayor cantidad de agua posible y llegan a pesar diez toneladas, de las cuales cuatro quintas partes o más son agua, por eso los buhitos viven placidamente en sus cuevitas. Los saguaros pueden vivir hasta doscientos años y crecen lentamente, un metro por cada veinte ó cincuenta años.
Aunque el desierto es un mundo escondido y supuestamente estéril durante la sequía pero cuando cae la primera lluvia la vida reaparece y se convierte en un paraíso. Todo se llena de colores, los cactus florean en azul, rojo, amarillo y blanco, las ranas salen de los lechos de lagos secos para reproducirse, y las semillas de diente de león que se encontraban en potencialmente en espera florecen y producen más semillas para asegurar su perpetuidad. Todo se convierte en un mundo verde y multicolor.
Los árboles como el palo blanco, el palo fierro,

el torote, el palo verde y el mezquite tienen otros sistemas de adaptación como crecer a la orilla de riachuelos y en las faldas de los cerros, son chaparritos para contrarrestar la fuerza del viento que cuando sopla, si que sopla y también para tener la madera muy dura y raíces largas que penetran en la tierra hasta encontrar un depósito de agua.
Por cierto que del Palo Fierro se obtienen una hermosas artesanías casi siempre zoomorfas

El mezquite, por ejemplo, es casi todo raíz en su juventud, pero cuando encuentra agua crece.

A su vez, la fauna emplea sus propios sistemas de supervivencia e insectos como las arañas y los escorpiones

han aprendido a vivir a sus anchas en este mundo de contrastes. Los huevos de algunas especies de camarón se mantienen en estado latente en charcas secas, las cuales al llenarse dan vida a estos animales. Aunque parezca increíble hay aproximadamente veinte especies de peces en la mayoría de los desiertos de y cada una de ellas ha encontrado también la manera de sobrevivir en este clima contrario a su naturaleza. Por otra parte, hay una gran cantidad de reptiles como lagartijas, iguanas, lagartos, culebras, tortugas y serpientes que han hecho del desierto su hogar.
Las aves están también presentes y durante las tardes en los aguajes se pueden ver gorriones, carpinteros, palomas, codornices y correcaminos que llegan a beber, y a éstos dos últimos se les puede observar también corriendo entre los arbustos. El correcaminos

no es un ave que vuele sólo cuando está espantada, y cuentan los vaqueros que es un animal muy listo, pues cuando ve a una culebra dormida va y la rodea de choyas, después le da un picotazo y cuando ésta empieza a moverse se espina toda, entonces el correcaminos aprovecha y acaba con ella. Hay también aves rapaces como el gavilán, el cual caza pequeños pájaros y roedores como la rata canguro o guancito.
El resto de la fauna del desierto de está compuesta por los mamíferos, muchos de ellos como el coyote, el zorro, los roedores, las liebres y los conejos viven en madrigueras subterráneas que son un perfecto aislante del exterior, tanto del calor como del frío y durante las épocas de sequía acumulan alimentos dentro de estos refugios para así poder sobrevivir. Los pumas, sin embargo, viven en cuevas y abrigos rocosos.
Otros animales del desierto como el borrego cimarrón, que habita en las peñas y sierras más inaccesibles,

y el venado bura

se han convertido en preciados trofeos cinegéticos por la belleza de sus cornamentas; por tal motivo los cazadores furtivos los buscan mucho y los han puesto al borde de la extinción.
Y finalmente llegamos con los últimos habitantes del desierto,


los Gnomos, grupo que antiguamente habitaba la Isla Barkly, la más grande del continente con más de dos mil kilómetros cuadrados y que se localiza en la parte central del mar del Camellín frente a Floresta, separada de este por el canal del Infiernillo. Esta isla fue decretada reserva natural en el siglo XXV, y tal hecho provocó el desplazamiento de la comunidad de su hogar ancestral.
Los gnomos son unos seres diminutos, miden entre diez y cincuenta centímetros, puede que haya otros un poco mas grandes, pero quizás vivan en zonas boscosas o desconocidas. Esta pequeña gentecilla (como antiguamente se los llamaba), han inspirados miles y miles de relatos, tanto en los cuentos infantiles como en los mas elaborados destinados a los adultos.
Se les atribuyen poderes mágicos, esto es debido a que no están atados a la forma racional de entender el mundo como los seres humanos, conservan tradiciones de millones de años y su objetivo es el ascenso espiritual, pero no como lo entendemos nosotros, sino por una evolución de la conciencia como seres de luz acompañando a la tierra. Les cuesta mucho el desarrollo, pero no dejan su camino, además su destino es morir cuando la tierra muera.
Por eso están en armonía con la tierra y sus tesoros, tienen acceso a cualquier lugar del planeta, pueden divertirse con la materia tanto como con sus usos y son tremendamente divertidos y tímidos, pero cuando hacen amistad con un ser humano lo llenaran de regalos constantemente, le traerán joyas, dinero, piedras, metales como oro, plata, hierro, etc. O simplemente los cuidaran, como es el caso de Pócolo Gnomo encargado para el cuidado de Pame y Chellín
Era Pócolo, eterno, vitalicio y celoso vigilante guardián tanto de Pame como de Chellín.
Era uno de esos momentos de suerte en el que considerando que estaban en el mismo lugar los tenía en una sola visual pero cuando se mantenían en diferentes sitios tenía que multiplicarse por dos y viajar de un lugar a otro sin importar la distancia, claro que el ser un duende abreviaba y en mucho el esfuerzo y el tiempo para casi instantáneamente estar con uno y con otro. Lo más lento que había realizado un traslado invirtió ¡Una cienmillonésima de Nanosegundo!, bastante rápido tomando en cuenta su edad ya que para el dos mil veinte cumpliría sus primeros dos mil quinientos años y siempre cuidando a jóvenes tipo Pame y Chellín.

A lo lejos el ronroneo de un potente motor se dejó escuchar.
Chellín apareció caminando con su típico andar lento y desgarbado, algo raro para tratarse de un jugador estrella de Rugby, pero eso era genético por línea directa de su padre mismo que a su vez había heredado tal “Cualidad” de su padre, el abuelo Norsi-Bo.
Su vestimenta no podía ser más que adecuada ya que desde el punto de vista de Pame la combinación de Jeans, camisola en color beige, botas “Caterpilar” al mismo tono de la camisola, el cinturón era herencia del abuelo Norsi-Bo y según él mismo les había referido lo había adquirido en uno de sus primeros viajes con Mami Kity de recién casados, así que era un verdadero tesoro casi comparable con el ajedrez de figuras elaboradas con puntas de cuerno de toro de la ganadería de Miura lidiados en la Plaza de Pamplona en España.
 ¡Pame!
 ¡Chellín!
 ¿Cómo llegaste?
 Pues caminando
 No seas chistoso
 Bueno es que, es que
 Eso es mío
 Pues es que quiero que veas dos cosas
 ¿Dos? ¡Que impresión!
 Bueno primero la menos impresionante, así que te pido que te voltees y que cierres los ojos hasta que te diga que veas. ¿Sale?
Chellín hizo mutis tras una duna y al poco apareció empujando un auto que no había querido arrancar para hacer un arribo silencioso.
 ¡Voltea y abre los ojos lentamente!


Pame quedó boquiabierta, muda, con los ojos desorbitados y solo acertó a preguntar.
 Y tu Lamburginni amarillo
 Bueno es que, es que
 ¿Otra vez? Ya te dije que eso es mío
 Es que pues decidí que era tiempo de cambiar y solo espero que no me digas como Mami Kity
 ¿Cómo mami Kity?
 Pues si, es blanco “pero” no había más claro
 Ja, ja, ja
Rieron los dos y se abrazaron al tiempo que detrás de la duna apareció caminado lentamente y con una sonrisa apenas reprimida la misma Lian.
 ¡Lian! Esto si que es una sorpresa
 Pues hasta que cumplió sus primeros diez y ocho mis papas le permitieron salir de aventura con nosotros pero te puedo decir que solo los convencimos hasta que les comentamos que veníamos contigo
 Eso es bueno ya que saben que tendremos una buena aventura
Trepado en lo más alto de un saguaro Pócolo Casi se va de espaldas, trato de asirse de lo primero que tuvo a mano dándose tremenda espinada. No sabía sí gritar de dolor o de la sorpresa y solo atinó a decir para si mismo.
 ¡Ahora son tres!¡Son Tres! ¡Son Tres!
Al tiempo que caía sobre una viznaga solo para volver a espinarse.
 Pues como ya sabes, Lian acaba de graduarse con Mención Honorífica como Chef
 ¡Claro que lo se! Yo estuve en su Graduación, “Sonsis” Estuve en la American University Paris allá en el 102 Rue Saint-Dominique en París
 Bueno, es que, es que
 ¿Otra vez?
 Bueno es que trajimos una buena dotación de alacena para saborear sabrosas comidas.
 Bueno además de lo que trajimos espero investigar acerca de los recursos alimentarios en el desierto
 ¿Alimentarios en el desierto?
 Y no solo eso sino que también espero investigar los elementos vitamínicos
 Pues suena interesante
 Pues mira, con la ayuda de Chellín montaremos un laboratorio en tu cabaña
 ¿Cabaña? Pues mira es solo una chocita
 No te preocupes que antes de llegar a este ambiente limpio y puro pasamos a comprar un camper que espera a verlo


 Pues esperaremos y por lo pronto pasen a refrescarse con una limonada que les preparé
 Eso si que suena bien
 Pasemos
Afuera y sacándose las espinas Pócolo no dejaba de repetir;
 ¡Ahora son tres!¡Son Tres! ¡Son Tres!
Datos del Cuento
  • Categoría: Infantiles
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