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¿Quién hizo a Dios?.

¿Quién hizo a Dios?.

(Relato Religioso. -79.)                                       

En una noche llena de estrellas que brillaban en el firmamento, un padre que está maravillado por el bello espectáculo de puntitos blancos en el cielo, le dice a su hijo de siete años:

-“Hace mucho tiempo, Dios hizo la Tierra y todas las cosas que hay en ella. También hizo el Sol, la Luna y todas esas estrellas que tu ves en esta noche”.

El niño también maravillado del bello cielo que está al alcance de sus ojos se queda pensando por un rato, y entonces le pregunta al padre: “Papá,… ¿y quién hizo a Dios?”.

“Nadie, -responde el padre-, Dios siempre ha existido”. Por ahora, esta respuesta tan sencilla deja contento al hijo. Sin embargo, según siga creciendo, el tema le continúa causando curiosidad. Le cuesta entender que exista alguien que no haya tenido principio. “¿Cómo es eso  posible?, -piensa-. Hasta el universo tuvo principio”. La pregunta sigue sin contestarse y tal vez usted amigo lector, se la haya hecho alguna vez en su vida: ¿De dónde vino Dios?.  ¿Qué nos dice la Biblia sobre este asunto?. Veamos:

La Biblia, practicamente nos dice lo mismo que dijo el padre que acabamos de mencionar. Moisés le dijo a Jehová: “Antes que nacieran las montañas mismas, o tú procedieras a producir como con dolores de parto la tierra y el terreno productivo, aun de tiempo indefinido a tiempo indefinido tú eres Dios”. [Salmo 90:1, 2]. El profeta Isaías dijo también algo parecido: “¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra?”. {Isaías 40:28, Versión Reina Valera. 1960]. Y la carta de Judas, en su versículo 25, reconoce que Dios ha existido “por toda la eternidad”.

Estos textos demuestran que Dios es el “Rey de la eternidad”, como lo llamó el apóstol Pablo en 1 Timoteo 1:17. En otras palabras, siempre ha existido, sin importar cuánto retrocedamos en el tiempo. Y siempre existirá. [Revelación o Apocalipsis 1:8]. Dios no tiene principio ni fin, esa es una de sus principales características.

¿Por qué se nos hace tan dificil comprender esta idea?. Porque nuestra vida es muy corta y eso hace que midamos el tiempo de un modo totalmente diferente a Jehová Dios. Por ejemplo en 2  Pedro 3:8 se nos dice que para El, mil años son como un solo día, pues ha vivido siempre. Veamos ahora la siguiente ilustración: Un saltamonte adulto vive unos 50 días. ¿Podría entender lo que significa vivir 70 u 80 años, la duración de nuestra vida?. !Difícilmente!. Pues nosotros somos como ese saltamontes cuando nos comparamos con el Creador. Nuestra capacidad mental es insignificante al lado de la suya   [Isaías 40:22 y 55:8, 9]. Así que es normal que hayan aspectos de su naturaleza que no podamos comprender.

Podemos citar ejemplos de cosas eternas para ayudarnos a entender la eternidad de Dios. El caso del tiempo, nunca termina y siempre ha existido. El universo se expande y no tiene fin. La matemática, si ponemos números a la izquierda de un punto nunca dejaremos de poner números, igual ocurriría si escribiéramos números a la derecha de ese punto, nunca dejariamos de escribirlos. Hay cosas infinitas que quizás no comprendamos bien, pero podemos imaginar el sin fin de la vida de Dios.

Aunque nos cueste entender que Dios es eterno, la idea es lógica. Si alguien hubiera creado a Dios, esa persona sería el Creador. Sin embargo, la Biblia afirma que Jehová Dios es quien hizo todas las cosas. En Revelación 4:11 leemos: “Digno eres tú, Jehová, nuestro Dios mismo, de recibir la gloria y la honra y el poder, porque tú creastes todas las cosas y a causa de tu voluntad existieron y fueron creadas”.  Además, nosotros sabemos que hubo un tiempo en que el universo no existía como se demuestra en Génesis 1:1 y 2. ¿Cómo apareció?. Obviamente, su Creador y Diseñador ya tenía que existir. También, tuvo que haber existido antes que cualquier otro ser inteligente como su primer Hijo y los ángeles. [Por favor lea Job 38:4, 7 y Colosenses 1:15 en su Biblia]. Está claro que, antes de empezar a crear, Dios estaba solo. El no pudo haber sido creado, pues no había ni nada ni nadie aparte de El. No existía una familia celestial al estilo del paganismo Greco-Romano.

Nuestra propia existencia y la del universo son prueba de que existe un Dios eterno. El Ser que puso en movimiento el inmenso universo y estableció las leyes que lo controlan tuvo que haber existido desde siempre. En una noche sin luna, donde brillan más las estrellas, podemos meditar en esto. Job 33:4 nos dice: “El propio espíritu de Dios me hizo y el propio aliento del Todopoderoso, procedió a hacerme vivir”. Solo Dios pudo darle vida al resto de los seres vivos.

Si desea más información al respecto, puede conversar con los Testigos de Jehová del área donde usted vive y con gusto ellos le darán respuesta a sus inquietudes usando la Biblia como libro de texto.

Y recuerde: Lea la Biblia todos los días de su vida para que llegue a saber más sobre el Creador de todas las cosas, Jehová Dios.

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