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¡AMA DE CASA!

Había terminado la compras cuando pasó por delante de la
zapatería, y aquel día se le ocurrió mirar la vidriera. Y los vio, unos
zapatos preciosos, color beige, con un tacón de aguja, como los de
antes, modernos.
Suspiró y siguió caminando. Cuando estaba por cruzar la calle se detuvo
por el semáforo, se quedó quieta con la mirada perdida preguntándose
¿porqué no?
¿Porqué no se los podía comprar? Eran caros , pero no más que las zapatillas de su hijo mayor...que las corbatas de su esposo...que la computadora de su hija, (que todos usaban menos ella, porque nadie le pregunto ni se ofreció para enseñarle.)
Pero, pensó; con el dinero que valían pagaba la factura del teléfono, y las expensas...u otros gastos..
El ruido del transito la hizo reaccionar y volviendo sobre sus pasos se paro otra vez frente a la vidriera.
Suspiro hondo y entro...
Al abrir la puerta de su casa con las compras del día en una mano y los
zapatos en la otra, no supo porqué, pero el silencio de la casa vacía la estremeció y un terror interior le lleno los ojos de lagrimas.
. Era sábado. Cada uno de sus hijos tenía un plan para salir,
su marido había salido en busca de sus amigos. Que según decía le ayudaban a despejar su mente de tanto trabajo.
.Miró la hora, era tarde y tenía que hacer la comida. Dejó las bolsas con las compras en su sitio y fue a cambiarse de ropa.
Puso la caja de zapatos encima de la cama, la abrió , los sacó,
los acarició y sintió el tacto suave y cálido. Se sintió feliz.
La comida ya estaba preparada, la mesa puesta, el lavarropas encendido
lavando la ropa de la familia. Plancho la camisa de su hijo para esa noche, ordeno las
habitaciones. se puso los zapatos nuevos y salió.
Iba bajando las escaleras despacio, sin prisas, la gente pasaba a su lado con los rostros crispados
Era la hora de cenar y era obvio las ganas que tenían
de llegar cuanto antes a sus hogares. Ella, no.
Bajo los últimos peldaños y se dirigió con paso firme por el anden,
llegó hasta el final del mismo y suspiró, ¡ya estaba allí! y ahora...lo más fácil. Había mucha
gente pero nadie la miraba.
Y sintió la llamada, como tantas veces, era como si esos hierros tuvieran la fuerza
de un imán que la atrajesen, que la hicieran ir hasta ellos. Y así lo hizo, no se resistió y se tiró.

Cuando les dieron la noticia a su familia, todos negaron la
hipótesis del suicido. Debió caerse decían, últimamente andaba distraída, pero tirarse, no,
¿ porqué ?
Su marido tenía trabajo...sus hijos eran buenos estudiantes...
ninguno era adicto a ninguna droga...no padecían ninguna
enfermedad inconfesable...la casa donde vivían era suya...tenían un buen
coche...nunca hubo broncas, ni peleas fuertes en su casa...su marido aún se acordaba del aniversario de boda...¡ No, no había razón alguna, fue un accidente nada mas!

Al comprarse los zapatos y tenerlos entre sus manos acariciándolos.
Se dio cuenta de que estaba acariciando el único sueño que
se había permitido en veinte años.
Y sintió el vacío más profundo y angustiante que podía resistir.
Una intensa punzada en el corazón le hizo desear la muerte en ese mismo instante.
No eran las ampollas ni los callos de sus manos ,
no era el abandono que poco a poco se había apoderado de ella
ni los útiles o herramientas lo que más le dolía. Era el silencio de
esa casa, limpia, ordenada, con olor a lavanda, era ese vacío, que la hizo
pensar en su soledad. En esos veinte años, lavando, guisando, comprando para los
demás. Dejando escapar sus sueños de niña, ahogando sus fantasías.
Y sus lagrimas, las únicas que la acompañaban durante los últimos tiempos.

Y por primera por vez fue egoísta, y su ultimo pensamiento
fue...¡¡QUE LINDO ME QUEDAN MIS ZAPATOS NUEVOS!!
Datos del Cuento
  • Categoría: Sin Clasificar
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5 comentarios. Página 1 de 1
Sirena Wilde
invitado-Sirena Wilde 28-04-2004 00:00:00

Buena suerte con ese cuento pulelo mas todas las mujeres debemos ser egoistas es algun momento.

Lola
invitado-Lola 25-04-2004 00:00:00

Me ha encantado tu historia; a veces el dolor no está reñido con la belleza. En tu caso, la has rozado con tus palabras. Muchas mujeres se identificarán con tu historia. Ojalá las animes a se ellas mismas y no vivir persiguiendo sueños rotos. Un beso, y sobre todo ¡no dejes de escribir!

MILENA
invitado-MILENA 11-10-2003 00:00:00

ME PARECIÓ MAGNIFICO, EM REALIDAD AVECES ESTAMOS TAN PREOCUPADOS POR LO DEMÃS QUE SE NOS OLVIDA LO MÃS IMPORTANTE, AVECES POR QUERER DAR LO MEJOR NUESTRO NOS OLVIDAMOS DE NOSOTROS MISMOS. MI MAMI MURIÓ HACE UN AÑO Y MEDIO, Y FUE DESPUÉS DE SU MUERTE QUE QUISE DECIRLE MUCHO QUE SIEMPRE SENTÃ, QUE LA AMABA, LA ADMIRABA, LA IDOLATRABA,... PERO YA FUE TARDE

maria del carmen
invitado-maria del carmen 08-10-2003 00:00:00

este relato nos hace reflexionar sobre una tremenda realidad,nosotras como amas de casa nos dedicamos a los hijos , al esposo y pocas veces tenemos tiempo para nosotras.

Umbral Almazan
invitado-Umbral Almazan 06-07-2003 00:00:00

Me gusto quiza porque nadie escribe sobre las amas de casa, no hay grandes elogios para esta profecion, ademas creo que esta un poco triste ya que la liberacion de ella deberia ser mas alegre(la ama de casa, me refiero.

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