Todo comenzó cuando mi papá entró corriendo a casa a alta horas de la noche.Estaba pálido y agitado.Le pregunté qué le pasaba y,sin darme más respuesta que una mirada de terror,subió a su habitación.Mi mamá me miró y sin darme explicaciones,me mandó a mi cuarto.Frustrado,me fui a mi habitación y,cuando estaba por dormirme,se me ocurrió una brillante idea:tomé una cuerda del cajón y bajé con ella por la ventana.Afuera hacía frío y había luna llena.

Iba yo paseando por un bosque,cuando de pronto ví unos ojos amarillos que no apartaban la vista de mí.Antes de que pudiera reaccionar,una enorme bestia gris había clavado sus colmillos en mi pierna.Aterrorizado,eché a correr hacia mi casa,atormentado por el más terrible dolor.En cuanto llegué me metí en la cama e intenté dormir,pero tal era el dolor que no conseguía pegar ojo y cuando a medianoche al fin lo conseguí,tuve pesadillas con esos feroces ojos.

A la mañana siguiente bajé cojeando a desayunar,tratando de disimular lo mejor posible mi herida,pero eso no impidió que mi mamá la viera.En menos de un minuto me veía echado de la cocina,escuchando a mis papás discutir.Capté fragmentos de la discusión como:”te dije que no lo provocaras”,”¿ahora cómo podrá ir al colegio?”… confuso,iba a subir a jugar cuando mi mamá me llamó.Comenzó a revisar mi herida y concluyó diciendo: Sí,definitivamente lo es”.

Aún más confundido,decidí no hacer preguntas y subir a mi habitación.Al cabo de un rato oí cómo alguien tocaba suavemente la puerta.Era mi mamá.Esta vez no iba a permitir que se anduviera con rodeos y le pregunté directamente qué me había mordido.La respuesta me dejó helado por unos momentos,pero de pronto todo cobró sentido:la expresión de terror de mi papá al entrar corriendo la noche anterior,la discusión entre él y mi mamá,a lo que se refería con:”sí,definitivamente lo es”,porque yo mismo empezaba a entender lo que era, solo que no podía creerlo.Solo me quedaba esperar hasta la siguiente luna llena para confirmarlo.