Érase una vez un papa tan valioso que no tenía precio. Y os preguntareis el porque....Este papá, igual que la mamá trabaja todos los días. Pero esto no supone ningún inconveniente ya que él siempre haya un hueco al medio día para venir por casa y comer con nosotros.Los fines de semana aprovechamos para ir a dar un paseo por el campo, jugar al baloncesto o simplemente disfrutar del solecito. Siempre tiene una sonrisa y alguna palabra de aliento que me hace sentir el niño mas importante del mundo. Por la tarde, solemos ir a dar un paseo por la ciudad: Papá se pone al lado de mamá y los dos parecen una parejita de enamorados. ¡Teníais que ver la cara de la gente cuando nos ve!El nombre de esté papá es ¡Papá Cuentos!. Y él es mi amigo y mi héroe. Es honesto, trabajador y leal. ¡Cuenta siempre comigo!, me dijo una vez de una forma muy especial....Papá Cuentos, a veces pone caras serias. Pero ni aún así deja de ser menos sensible. Él también me cuenta historias y, a veces, hasta me hace interpretaciones. Sin duda, ¡Papá Cuentos es increible! ¿No os lo parece a vosotros también?