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Mis Inquietudes y Defectos ( Autobiográfico)

Cierto dia cuando aun estabamos en cursos de Secundaria, yo por lo regular acostumbraba dejar incompletos los apuntes; fuera por distraccion o bien porque no entendia bien lo que dictara el profesor.  esa vez nos habian pedido los apuntes de manera urgente pues eran para un trabajo en grupo o exposicion, no recuerdo bien. el caso es que se lo hice saber a mi mama y ella me comento que quizas uno de mis compañeros que se decia apellidar Loo Nava ( aun ahora me parece curioso y chistoso su apellido), con el que apenas me llevaba y a veces me parecia algo amanerado tenia los apuntes que me hacian falta. me sorprendi cuando mi mama dijo que sabia donde vivia. el chico vivia en un cuarto contiguo a mi antigua escuela donde habia hecho la primaria hacia tiempo. asi,  algo azorada o solo un poco turbada tuve que hacerlo. pues mi mama ignoraba como me llevaba con el o sea: una veces me llevaba bien y otras no tanto. apenas acepte la proposicion de mama y tuvimos que acudir con el. al fin, lo encontramos que se hallaba en su casa e iban de salida.  ante la presencia de mama le solicite los apuntes a lo cual este accedio de forma neutral. cuando un hombre medianamente maduro, frisaria entre los 36-38 años; moreno claro y de un leve bigote salio coincidentemente para arreglar un asunto casero. mi compañero apenas me parecio murmurar ( o eso creo) : ". no le hagas caso; es mi padrastro". yo  algo sorprendida y sin ganas de inmiscuirme le hice caso a su comentario. tras copiar lo que me faltaba de los apuntes nos regresamos a casa. incluso, de manera coincidente ya no se llevaba  tan pesado conmigo como antes luego de este encuentro. bueno, luego transcurrio el curso de manera normal. cuando llego el fin de curso que obvio acredite con un 7. mis padres por ese entonces nos exhortaban a ver las opciones para ingresar al bachillerato. aunque bueno, a la fecha  aun sigo revalidando el bachillerato pues solo hice una carrera tecnica en el CONALEP.  asi, cierto dia que venia de las tortillas pase cerca de esa escuela donde vivia aun quien mencione anteriormente. habia un agujero en la pared de la ladrillos del plantel. como los cuartos se hallaban del lado izquierdo del colegio se podia ver parte del traspatio y  los cuartos reducidos. el hombre que habia divisado esa vez por casualidad se encontraba afuera,  en el patio. por lo que pude notar se dedicaba a faenas de mecanico o algo por el estilo. el estaba  espulgandose o mejor dicho, enjuagandose con una manguera su cuerpo. por la distancia solamente se distinguia el dorso para arriba de su cuerpo; este no era delgaducho ni mucho menos flacido. era su piel morena bronceada con ciertos musculos que apenas se distinguian del dorso y brazos. no se porque, pero ese dia me quede espiandole por el agujero como 50 minutos. pese a que en ese entonces me atraian solamente los chicos jovenes y rubios, con carisma; en resumen, era una fanatica de las series de television juveniles o programas familiares mexicanos como el chavo del ocho,  el chapulin colorado, la niñera,  salvados por la campana, doggy houser, El universo secreto de alex mack, los simpson, ciencia loca, entre otros. quiero decir, que no estaba tan embelesada con tener un novio real aun como era el caso de otras chicas que conocia en ese tiempo. en fin, ese breve fisgoneo me hizo contemplar su cuerpo rebosante del calor vespertino. senti  un asco  prolongado al comienzo, debido a que era una adolescente enfermiza aun. pero despues crei cambiar mi impresion de asco  y desconfianza. ahora se trataba de  admiracion  seguida de excitacion. luego de este espionaje casero le vinieron otros mas, algunos menos breves que otros.  me pude cerciorar de la veracidad en el comentario expresado por mi compañero  cierta noche de domingo que pasaba con mi familia por esa colonia, pues regresabamos de una fiesta regional;  el tipo parecia irritado. asi la mujer y los hijos venian con el, ocupandose  cada uno de lo suyo. cuando no se porque ni como, pero el hombre le resono una bofetada a uno de los  hijos que  le habia murmurado algo y a Adrian (  asi se llamaba mi compañero) lo reprendio  por igual con palabras estridentes. yo solamente  observe de lejos la escena.  despues, supongo o creo recordar que otros quehaceres ocuparon mi mente y le perdi la costumbre a ese rito que me conducia al camino de mi sexualidad, quizas  el comienzo de mi madurez. en fin, aun ahora  ignoro porque ha venido esta vivencia a mi mente. quizas sea el libido que ya quiere aflorar a mi. dkma.

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