Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Cuento
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Cuento
Categoría: Sin Clasificar

En la prontitud de la noche

~Parece estúpido pero me reconforta salir, como hoy, a un pequeño bar lleno de gente que puede ser tranquilamente alguno de mis sobrinos o hijos y sentarme a verlos, con mi cigarrillo entre los dedos, una copa, sentir como me fusiono con el ambiente, el humo, las risas, la música estridente, sentir tal vez que aún no estoy listo para morir y que de una forma u otra estas banalidades de la vida sirven para algo...

Sé también que ya no puedo pasar desapercibido como antes, que ahora mis cabellos grises me delatan y a la vez me aíslan de mis objetivos, ser uno mas del montón, parece estúpido, ya lo sé...

Sí, creo que te entiendo, yo hace un año, exactamente un año, no podía salir de mi casa hasta más haya de las once de la noche, parece que mis padres se han dado cuenta de que ya no soy una niña, que prácticamente soy una mujer y que necesito mi espacio, y esto aunque no lo creas lo he conseguido sin ser una chica rebelde, impulsiva, que se yo, como una de mis amigas...

Todavía no me has demostrado lo contrario... te diría que me aburres pero no se mentir y la verdad hace tiempo que no converso con alguien...
Así... eso es lo que piensas? la verdad no me sorprendes, pero yo tampoco he hablado con alguien sincero hace mucho tiempo, y eso me gusta, en realidad no lo he buscado pero como todo en esta vida llega sin aviso y lo peor de todo, sin permiso...

Ja, Ja, Ja... yo también pienso eso, te invitaría una copa pero me sentiría un corruptor de menores...

No te preocupes que la copa te la invito yo, porque a mi si me gusta sentirme una corruptora de mayores...

¡Mozo!... tráiganos dos cervezas, heladas y las anota en mi cuenta...

Vaya, vaya, toda una "mujer", y de carácter, la verdad no sé si eres una niña malcriada o una verdadera mujer inteligente...

No pienso demostrarte nada...al menos ésta noche no, o eso es lo que esperas de mi.

No, no te pongas en ese plan porque la verdad me has agarrado de sorpresa, lo que me ha sorprendido es este encuentro casual y para mi buena suerte, muy agradable...

La casualidad no esta en ninguno de mis libretos...

¿Te crees una buena actriz? o es que todavía no sabes como comportarte.

¿No lo sé, pero acaso sabes algo de actuación?.

Tú que creerías al ver a un hombre maduro conversando amenamente con una chiquilla...

Humm... no sé, aun no te he besado.

Ja, Ja, Ja... ¡salud mocosa!

Ja, Ja, Ja... ¡salud viejo!

¿Fumas? ¿o todavía no esta en tu repertorio?.

Sí pero de esos no venden acá... pero no importa, me conformo con los que tú fumas.

¿Qué edad tienes?

Puedo ser tu padre pero eso no importa ahora, en realidad depende de como me siento, y de lo que puede ofrecerme el mundo.

Y... ¿has tenido alguna oferta interesante?

Hasta ahora, solo tú...

Ja, Ja, Ja, viejo zorro, ¿y porque crees que estoy en la lista?.

¿Porqué? porque has venido a mí, no tienes ganas de irte y porque estas dispuesta a emborracharte conmigo.

¡Ajá! erraste en una, sí tengo ganas de irme, pero estoy dispuesta a emborracharme contigo.

¡Mozo!... tráenos una jarra de cerveza y asegúrate que no se acabe en toda la noche.

Vaya, te decidiste.

Sí, me gusta hablar contigo.

Ahora dame un beso...

¿No crees que eso lo insinúa el hombre?

Sí pero no estoy dispuesta a dejarte pensar...

¿Oye niña, quien te enseñó a besar así?.

El humo de tu cigarro.
¿Quieres fumarte una cajetilla conmigo?

No, si es posible un cartón entero.

Me sorprendes mocosa, si fueras mi hija te mataría.

Sí pero ahora soy tu amante y no creo que estés dispuesto a hacerlo.

Tú lo has dicho...
Ah, si me vuelves a decir niña o mocosa me voy.

Carajo, toda una "mujer" de carácter.

Todavía no me conoces.

¿Y tú sí?..

Bueno eso lo dirás después, o ¿no te encanta acaso que te acose una mujer que es prácticamente una niña?.

La verdad no me lo esperaba, pero me gusta, me haces sentir bien...

¿Joven?...

¡Carajo!... no me delates, si lo sabes quédate callada.

Esta bien, brindemos y tratemos de sacarle provecho a la noche que se va y nos envuelve discretamente.

Parece estúpido pero me reconforta salir, como hoy, a un pequeño bar lleno de gente que puede ser tranquilamente alguno de mis sobrinos o hijos y sentarme a verlos, con mi cigarrillo entre los dedos, una copa, sentir como me fusiono con el ambiente, el humo, las risas, la música estridente, sentir tal vez que aun no estoy listo para morir y que de una forma u otra estas banalidades de la vida sirven para algo...

Eso me lo dijiste cuando me senté en tu mesa.

Sí y no sé si es un lamento o un escape a mi futuro... tal vez dentro de muchos años pienses como yo, o si eres mas fuerte te hayas suicidado ya...

Tal vez, pero lo que sé ahora es que ambos aprendemos de la noche, yo para vivir y tu para morir... o viceversa.

Humm... estoy emborrachándome con una ni... perdón, una mujer demasiado joven para hablar así, ¿tú que pensarías?.

Que el infierno no es tan malo para vivir y que sólo te exige estar dispuesta a ver las noches pasar con o sin mensaje, aprendiendo o perdiendo, ¡salud!.

¡Salud! parece mentira, estamos tres horas conversando y aún no sé tu nombre.

María, y el tuyo?

José.

Ja, Ja, somos unos santos.

Sí, somos unos santos borrachos.

No te angusties, que esta noche vas a rejuvenecer mil años.

Eres dura, ¿sabías?

Ya nos vamos conociendo, y ¿te gusta?.

No.

A mi tampoco, perdóname y dame otro beso.

¿Porque esa lágrima? Estas arrepentido…, ¿quieres que me vaya?...

No, al contrario quédate conmigo y sigue deleitándome con tus locuras...¿sabes porqué lloro?...porque creo que en el poco tiempo que hemos hablado me he estado enamorando de ti...

Si te diría que yo también no me creerías...vamos a otro lado...

¿Qué?... ¿estás loca? ¿dónde quieres ir?...

A cualquier sitio a demostrarte que tú también me gustas, a romper mi palabra, no quiero demostrarte nada, no sé, estoy borracha.

Esta bien, vamos a mi casa, a hacer el amor como locos, eso es lo que quieres no?...

Sí... para después llorar juntos en la lejanía de la noche, cuando hayamos aprendido algo más de este estúpido mundo, donde el día no se creó para nosotros...

¡Mozo!... la cuenta... ¿porqué lloras María?...

Porque sé que en la mañana todo se habrá extinguido, y no te veré más, hasta que la noche nos junte de nuevo, y la verdad me duele y sé que tanto como a ti, porque el final está más cerca de lo que nos imaginamos, pero no importa ambos sabemos la reglas de este juego...

Señor, su vuelto...

Gracias...

Buenas noches...

 

Datos del Cuento
  • Categoría: Sin Clasificar
  • Media: 0
  • Votos: 0
  • Envios: 0
  • Lecturas: 796
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 18.204.42.89

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Cuentos: 21.633
»Autores Activos: 155
»Total Comentarios: 11.741
»Total Votos: 908.508
»Total Envios 41.629
»Total Lecturas 53.552.815