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Mala Suerte

Ensayo de una relato breve 4

Los ojos la delataron, ella sabia que la regañarían, aunque buscamos, nunca logramos encontrar al pequeño perro que orgullosamente poseía asta ese día su padre. Tome sus brazos para despedirme después de que un grito la solicitaba, al parecer, su padre nunca creyó el cuento de que el animal permanecía dormido en una caja de zapatos; me sentí cobarde, era parte mi culpa y la despedida me exoneraba, pero no permitiste quedarme mas, decías que lo arreglarías tu. Y ante pocas soluciones la despedida su dio.
Durante el regreso solicite a mi amigo, que amablemente acepto viajar lentamente para hacer la ultima búsqueda del perro extraviado, pero fue un fracaso.
Llegue a casa ya mucho mas tarde, preocupado, intente dormir. Al tercer giro de lo que paresia insomnio la siempre inteligente almohada dio una opinión; a la cual me levante tan rápido que no me di tiempo de razonar, al borde de la cama comencé a decir al aire:
-Necesito tu ayuda, quiero verte, aparece, necesito hacer un trato- si cualquier persona hubiera podido verlo seguro pensaría que estaba loco, menos él, si, el dueño de la voz atrás a mis espaldas que dijo sin preocupación: sabes que no me permiten que me veas, pero eres muy terco.
-Quiero que te dirijas con Carolina- no me moleste en presentar ningún tipo de saludo, lo que pareció molestarle al preguntarme si quería que buscara al perro, alo cual le aclare - no,... bueno,... no se,... solo ve y ¡has algo!.
La discusión se quiso tornar larga parecía que nunca llegaríamos a un acuerdo, él me recordaba no mandarse solo, tiene jefes, mi petición era tonta, se metería en muchos problemas, podrían despedirlo, entre tanto que podría pasar conmigo.
-Por favor, necesito que hagas caso a mi petición, podré cuidarme solo, solo sera poco tiempo.
La discusión termina haciéndose larga, solo hablaba de lo peligroso que seria quedarme solo, pero también él sabia de lo terco que podía ser yo cuando me lo propongo, y después de tanto alegato termino aceptando mi petición mas molesto que de acuerdo. Se acercó a la ventana, y ante mis lentos ojos ya se encontraba en vuela hacia su casa.



Para el Lunes localizar a Carolina era prioridad, no costo ningún trabajo; en una platica breve, me comento, en efecto la reprendieron, le advirtieron que debía pagar el costo del animal, mas aparte, debía llegar temprano, bueno hasta que a su padre se le olvidara que estaba castigada. Talvez exagere y todo ya es asunto olvidado. Días después todo terminaría y regresaríamos a la normalidad.


No fue así, las pesadillas comenzaron. Y tiempo después, un acumulado de ojeras mostraban los muchos días que llevaba sin dormir. Diablillos atormentaban mis sueños, sospechaba la razón, es mas, sabia la razón, a mi Ángel le había dado por no volver, me aventure a asomarme por la ventana, iba a gritar pensando que talvez le podrían avisar que regresara, al parecer Carolina ya se encontraba bien.
Los días siguieron avanzando, y como lo esperaba las cosas comenzaron a salir mal, perdí las llaves un par de veces, obligándome a permanecer fuera de casa, se me han roto ya casi todos mis platos, no dejo de enfermarme.
Trate de acercarme a Carolina en muchas ocasiones, pero cuando la buscaba no me era posible encontrarla.
El colmo de las cosas llego a fin de semestre, pensaba en las vacaciones que ya necesitaba para descansar, pero grande fue mi sorpresa cuando un amigo estupefacto igual que yo por la noticia, me informo que dentro de la gran sabiduría del profesor de Electrónica decidió cancelarnos tres practicas de laboratorio, eso significa, reprobar. Las ultimas noticias las asimile rapido, en una mala racha cualquier cosa puede pasar, debía estar tranquilo. Pero no. Mi calma termina rápido, un día después, no se como explicar como, pero reprobé humanidades, y eso..., eso..., ya era demasiado.


Esperaba por la noche, no era la primera que solo me sentaba al borde de la cama para esperar el regreso, no sé ya cuantas ganas le había invertido en esperar, o solo lo hacia por inercia.
Las luces apagadas, la radio suavemente, hasta que un hola apenado salía de la ventana, no grite, pues estaba cansado, esperaba una explicación de cómo a quien considere mi mejor amigo se fue sin preocuparle de todos los problemas que tendría sin su presencia, y solo un día como cualquier otro, decide aparecer.
-Pensé que no regresarías-corte el silencio.
Pidió disculpas agachando la cabeza. Diciendo después. No lo are.
-Eres mi protector- le aclare con dureza – es tu responsabilidad estar aquí.
Una sonrisa sarcástica salió de su boca junto con la frase, podías cuidarte solo ¿o no?. Si quería molestarme lo consiguió. Exigí volviera a sus funciones, Carolina parece ya no necesitarlo; y si no regresa lo denunciaría a sus superiores.
Bajo el tono de voz al pensarlo. Pidió no ser denunciado por su incumplimiento de funciones, ello lo llevaría al destierro, que para alguno de su especie es lo peor que puede suceder. Lo cual yo ya sabia de antemano, mi amenaza solo fue parte del disgusto, lo conozco desde hace mas de 20años, nunca lo aria, y él lo sabe, por ello lo sospechaba, solo venia a despedirse.
Deseaba saber porque, y no espere mucho, se explico rápido y conciso. Planeo quedarme con Diana salió de su boca sin mucho esfuerzo.
-¿Carolina?- guarde el silencio para permitirle contestar, paso mas del tiempo requerido y con todo descaro, tome la palabra.
-Esa película ya la vi-una sonrisa leve- creo que es donde muere la chica y el Ángel queda muy triste ¿o no?.
Si quería fastidiarlo lo conseguí. Cuando de un salto, no te ironices eso no sera así, volando a través de la ventana fue lo ultimo que le alcance a oír.


De platicas pasadas había aprendido mucho de él, y no sé porque le sucedió esto, pero ahora tengo otra preocupación, las cosas no han mejorado, tropecé en unas escaleras y me rompí el brazo, me paso buscando a Carolina, pero casi no puedo verla, y cuando lo ago no se como explicarle que ella tiene algo que me pertenece.

Estoy desesperado. Existen ocasiones en las que lo veo mientras Carol pasea por los pasillos, pero solo me ve el Angel para evadirme. En tanto un incidente con mi grupo me dio una idea, este sé saturado, así que tomare mi ultima plan para recuperarlo, me inscribiré al grupo de Carolina, algo debe suceder.


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Datos del Cuento
  • Categoría: Estudiantes
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