Es un buen hombre, dicen todos
Nadie lo logro conocer
En su casa y con los suyos
Es distinto, otra persona
Y se hace temer
Golpes, gritos e insultos
A sus hijos y a su mujer
Hace de sus vidas un infierno
Que le hace fuerte a el
Pobre tonto, pobre iluso
Cobarde sin futuro
Que solo sabe beber
Para apagar su conciencia
Y sus fracasos esconder
Sintiéndose fuerte
Con quien, no se puede defender
Escondidos tras una puerta
Todos esperan ver
Que llegue muy cansado
Que no quiera comer
Que no vuelen los platos
Que no haga daño, otra vez
Cuando el alcohol, no le acompaña
Cuando solo se ve
Llora con impotencia
Por lo que hizo ayer
Por los gritos a sus hijos
Por los golpes a su mujer
Por los ojos aterrados
Que se cierran, cuando le ven
Pero todo se apaga
Todo vuelve a desaparecer
Cuando llega a la barra
Y comienza a beber
Así calla su conciencia
Así se siente bien
En la calle es un buen hombre
Y en su casa ruin y cruel
Ojalá se den cuenta
Y logren entender
Que ellos no son culpables
De su vida y su proceder
Quizás él sea un enfermo
Quizás ella también
Quien será el valiente
Que se atreva a romper
Ese circulo vicioso
Que nadie quiere ver
Abuelos, tíos, hermanos
Nadie quiere saber
Todos vuelven la cara
Es mejor creer
Que es problema de ellos
Y nada pueden hacer
Quien es más cobarde
En esta rueda cruel
El que desde dentro calla
O el que desde fuera
No lo intenta detener
Sabéis una cosa
Que el tiempo me hizo comprender
Los inocentes de estas historias
Los que no se pueden defender
Los que se sienten culpables
Los que no pueden dejaros de querer
Esos hijos, a los que marcáis sus vidas
Sin poder escoger
No hay un solo culpable, en esto
Siempre son dos
Él era un enfermo y maltrata
Pero ella lo consintió




Una hija