Estaba lloviendo fuerte, la tormenta era casi un dilubio, pareciese como si se fuera a derrumbar el cielo sobre mi, mi casa en ese tiempo era muy pequeña, yo miraba fijamente un cuadro que habia pintado mi abuelo antes de que muriera y escuchaba la musica tan cerca y tan lejos que mis pensamientos se perdian lentamente. Una hora mas tarde la puerta se abrio de golpe, las botas grandes y pesadas llenas de lodo caminaron hacia mi, no se que era, parecia que llevaba un manto enorme, pero solo pude ver su sombra, recuerdo que me dijo: " Adios, me voy pero sin antes besarte, te quieren, esto no es para ti, no es el momento...", y de pronto fue como despertar de un sueño, habia mucha luz y aun escuchaba llantos y oraciones, me habia intoxicado con gas butano sin darme cuenta, estaba en el hospital y mi familia alrededor mio, fue verdad, alguien me hablo y me dio una oportunidad mas, me hundi en un profundo sueño del que nunca iba a despertar y una oportunidad mas me fue concedida, fue verdad, lo que trato de decir con esto es que... hay que vivir como si fuera a ser el ultimo dia, aunque aveces querramos morir a cada instante, pero hay que remendar cosas del pasado, por eso aveces se nos permite vivir mas...