todo sucedió en un instante, casi en un pestañeo... la madre aun tenía a su hijo en los brazos... y los autos apuraban el transito... uno que otro policía figuraba sobre el teatro de concreto... enmarcando sobre el cuadro del momento, el cuerpo del atropellado que poco a poco se dejaba llevar al otro lado del sol... la muerte para mí siempre fue importante... sabía que iba a llegar mi hora, pero, cuando se es joven, no se le da mucha importancia a menos que haya un accidente como el de ahora... pensaba en mi madre, mis hijos, mi mujer y hermanos, en mis amigos, en mis perros, en las deudas y negocios y sentí que nada valía la pena tanto como la vida misma... ciertamente, el atropellado era yo... y pensar que uno tiene planes, sueños, anhelos, etc... y todo deja de ser vital ante hechos como este... esperaba a que llegasen los para-médicos, pero nada... tan solo los curiosos miraban alrededor de mi cuerpo que no lo podía mover, tampoco hablar, tan solo mirar y no sé desde donde porque mis ojos estaban cerrados... quizá era uno con mi alma... no lo sé, pero si sabía que me iba al otro lado... llegaron los paramédicos... levantaron mi cuerpo y lo pusieron sobre una canastilla... sentía pena... y pensar que era mi pobre cuerpo... ¿pobre cuerpo?... por supuesto... estaba en otro lado... qué ocurriría con mi madre y hermanos... ¿llorarían?... quién lo sabe... seguí mi viaje cuando supe que no moriría... algo me arrastró hacía mi cuerpo y sentí todos los dolores del mundo... luego, perdí la conciencia... cuando los abrí, estaba echado en una cama, rodeado de mis familiares, todos con los ojos llorosos... supe que no iba a morir... pero, al ver mi cuerpo, algo extraño sentí... no había piernas y tan solo tenía un solo brazo... me sentí mal... lloré, pero, para qué... mejor aceptarlo...
pasó el tiempo... vivo relajado y con una señora a mi lado... no sirvo mas que para dar pena... mis hermanos y madre me dejan en el cuarto con mis libros y música y una tv... aunque no tenga ganas de nada... pero sí quedaba algo mas... mi conciencia de que había algo mas... recordé mis enseñanzas y empecé a practicarlas... una fuerza llena de amor inundó mi ser... tuve ganas de ser feliz y sonreír ante semejante oportunidad de sentir la vida... pedí un ordenador y escribí... lo hice durante años y años... mi madre nos dejó y varios de mis hermanos se han ido... tan solo quedan mis sobrinos y mi soledad... sigo escribiendo y recibo cartas o mensajes alentadores... sigo escribiendo acerca de mi vida, del resto que me queda... ya tengo cerca de 100 años... sigo escribiendo como por milagro... mis sobrinos empiezan a irse y veo a sus hijos que me miran esperanzados en que me vaya de una vez por todas... considero que están cansados de mis gastos... en esos momentos quisiera estar muerto, pero luego, al ver lo que escribo y siento, no, no... es hermoso vivir... lo siento mas y mas gracias al conocimiento que tengo... era verdad, el conocimiento no ocupa espacio... pero la actitud cambia...
mis familiares me han dejado abandonado a mi suerte... vivo en un cuarto alquilado que lo paga el gobierno... sigo escribiendo, es lo único que hago y me ayuda a seguir viviendo... ya no sé de qué escribo, pienso que lo hago sin pensar... escribo del amor entre los seres humanos y la verdad... ya sea poesía o prosa... y mientras lo hago, algo sucede en mí... como si día a día mi ser se volviera celestial... para un día desaparecer como si fuera una luz apagándose... quizá sea así... por lo pronto, sigo viviendo... los cielos siguen brillando y las tardes se asemejan a un mundo ideal y procesado... espero, siempre esperaré a que cuando llegue mi hora de partida, mis sueños y mi corazón se vayan conmigo... en verdad, tan solo mi corazón... palabra de paz...